Colegio Español de Roma celebra 125 años al servicio de la Iglesia
Este año el Pontificio Colegio Español de San José de Roma cumplió 125 años como estructura de apoyo a los sacerdotes españoles que requieren culminar su formación cerca de la Santa Sede. La celebración estuvo marcada por el encuentro de los 72 alumnos con el Papa Francisco. Entre ellos, destaca la presencia de 7 sacerdotes venezolanos hospedados en sus instalaciones, gracias al apoyo que está brindando la Conferencia Episcopal Española a la Iglesia de Venezuela, que sufre los embates de la grave crisis económica del país.
Marinellys Tremamunno / Corresponsal de YI en Roma
El sábado 1 de abril el Pontificio Colegio Español de San José de Roma celebró 125 años de trayectoria. En el año 1892 el beato Manuel Domingo y Sol, sacerdote fundador de la Hermandad de Operarios Diocesanos, tuvo la intuición de crear esta institución con la misión de ayudar en la formación de las vocaciones, principalmente españolas y de otros países, que así lo requieran.
Hoy el Colegio celebra su historia ultra centenaria con 3.661 colegiales que han sido acogidos en sus instalaciones para desarrollar estudios en Roma. Sin duda un número notabilísimo de sacerdotes que se han formado gracias a la gran labor de los “operarios”, de los cuales 128 han sido obispos y 10 de ellos han sido beatificados. No en vano el cardenal arzobispo de Madrid Antonio María Rouco Varela, ex presidente de la Conferencia Episcopal Española, aseguró que ha sido una de las instituciones eclesiales que más ha contribuido a la formación de los sacerdotes españoles.
“De entre los numerosos presbíteros y obispos inscritos en el Catálogo del Colegio, los más de cien mártires de la persecución religiosa en España durante el siglo XX -algunos ya beatificados- son la ofrenda a Dios y por la iglesia más palpable de la fidelidad que aprendieron en este centro de formación y en la ciudad de los primeros mártires de la cristiandad”, según las palabras recogidas por el historiador del Colegio, Don Lope Rubio Parrado, en su libro “Aproximación Histórica”.
Con este antecedente, sin duda el Colegio Español de San José se presenta como un hito permanente de fidelidad en el servicio a la mejor formación de los presbíteros. Deseo que había expresado su fundador el beato Manuel Domingo y Sol: “Si Jesús bendice esta empresa, veo clarísimamente los resultados de la gloria de Dios que puede dar. Roma puede ser punto céntrico para formar una falange de sacerdotes, que luego puedan promover en España los intereses de la gloria de Dios en la diócesis”.
Solidaridad con la Iglesia en Venezuela
Pero una de las notas que viene caracterizando la historia reciente del Colegio Español es la estrecha relación con las Iglesias hermanas de América Latina. Hoy 7 sacerdotes venezolanos viven en sus instalaciones, gracias a un convenio de colaboración entre la Conferencia Episcopal de España (CEE) y la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), para acoger a los sacerdotes que necesitan estudiar en Roma tras el cierre temporal del Colegio Venezolano. “Nosotros gustosos de recibir a todos los sacerdotes que los obispos venezolanos quieran enviar a Roma. Estamos dispuestos a ayudarles de alguna manera, incluso económicamente, vista la situación tan grave que está pasando el país. Aquí tienen una casa”, aseguró Don Javier Malo Pérez, vicerrector del Colegio.
Para Don Javier es fundamental la formación del clero, por lo que recomendó a los obispos venezolanos que, a pesar de la crisis profunda que vive Venezuela, “no escatimen medios para que esa formación sea de verdad buena. Mucho ánimo y que sigan trabajando por la iglesia que peregrina en Venezuela”.
En el presente curso 2016-2017 componen la comunidad del Colegio 72 alumnos de 42 diócesis diferentes. Realizan estudios de licenciatura (51) y de doctorado (21), en 20 especialidades eclesiásticas distintas y en 12 centros de estudio de la ciudad de Roma.
“La situación en Venezuela es alarmante”
El rector del Colegio Español de San José, Don José San José Prisco, aprovechó la ocasión de la celebración del aniversario, para manifestar su preocupación por la situación de Venezuela. “Estuve en enero en Caracas para dictar un curso de derecho canónico y vi todo bastante caótico. Estuve hace 5 años y vi una gran degradación. Vi que había aumentado mucho la inseguridad ciudadana, todo más empobrecido, vi familias enteras recogiendo la basura, vi escenas bastantes tristes. Sufrí la escasez, no había café, no había azúcar y había que comer pasta una semana entera porque era lo que se había podido conseguir. Sí hay una escasez bastante grande de alimentos y de medicinas, me vine bastante preocupado”, dijo y enfatizó que “la situación es alarmante”. Recordó que monseñor Diego Padrón, presidente de la CEV recorrió 5 estados buscando una medicina para su hermana y lamentablemente falleció porque la medicina no llegó a tiempo.